Lo primero que hicimos con Juan fue andar por la estación de trenes, mientras Chugo nos esperaba en el pueblo.
Fuimos hacia el Renault 12 y buscamos a María para arreglar el tema del alojamiento a nuestra vuelta de Tolar Grande. Yo tenía el dato de Doña María, la señora de la casa con puerta roja. Golpeamos y salió de allí su hija quien nos dijo que no se daba más alojamiento allí y que podríamos averiguar en lo de Cecilia o en el puesto sanitario.
Casa de María.
Entrada a la Casa de Cecilia.
Puesto Sanitario.
Luego de hablar con Cecilia, caminamos por las desoladas vías, sentimos la soledad, el viento y los ruidos casi fantasmales de una estación desolada. Recorrimos allí sus abandonadas instalaciones hasta que nos encontramos con una sorpresa al llegar a la oficina de la estación. Allí se encontraba completamente cerrada, pero sumamente ordenada, con escritos que eran recientes y un dispenser de agua. Eso daba señales claras de que recientemente estuvo alguien allí adentro...¿pero quién?, ¿estaba en funcionamiento el ramal?. Eso no lo supimos.
3 comentarios:
Nos restan 86 Km. que son a todo paisaje, a todo color, a toda soledad, a toda aventura... Y A TODA ROTURA! :)
Excelente post.
Abrazo.
Chugo
Huy!! Entré porque me acordé de algunas cosas del salar de pocitos y me encontré con esto! Fuimos un grupo desde Santa Fe y llegábamos ahí a la tarde y paramos en el puesto sanitario. Cenamos y pernoctamos. Al otro día cantamos el himno al izar la bandera y seguimos hacia la casualidad. Quisiera recordar como se llama el enfermero
Hermoso!! Ver fotos de mi pueblo...los cilos en donde mi papá acopiaba el mineral... muchas gracias por visitarlo.
Publicar un comentario