Hacia la Ruta Nacional 40 que pocos conocen.

Salimos de las Termas de Coranzulí y pasamos rápidamente por afuera del pueblo en nuestra búsqueda hacia nuestro próximo destino: Susques.

Según el plan de viaje íbamos a tomar la Ruta Nacional 40 hasta las cercanías del paraje Lever en donde podíamos tomar alternativamente la Ruta Provincial 70 y luego empalmar con la Ruta Nacional 52 en dirección a Susques, o bien, seguir por la mítica carretera.

Al haber tomado conocimiento sobre el estado de la Ruta Nacional 40 y de confirmarlo a través de varias fuentes, es que nos hemos inclinado por cambiar el plan de viaje.

En los momentos previos al emprendimiento de dicho viaje nos hemos nutrido de mucha información que indicaba que el tramo entre Lever y Susques de la Ruta Nacional 40 estaba en muy mal estado.

En esta entrada quiero mostrarles un poco de esta Ruta Nacional 40 "que pocos conocen".

El paisaje gana en atracción poco a poco cada vez más. Pasadas las 11 horas llegamos a un punto en donde tuvimos que vadear el Río Coranzulí.

El paisaje cambia y se transforma en un gran valle de montañas grises que la asemejan a un paisaje lunar. El paisaje, sumamente atractivo, nos invitó a una breve parada. Allí denotamos que el material de las montañas era sumamente frágil, razón por la cual la acción del agua y el viento les otorga las extrañas formas que tienen.

 

 

Esta es la primer foto que resolvimos tomar con el disparador automático de mi cámara.

Estuvimos en este maravilloso paraje durante más de quince minutos hasta que emprendimos el camino. Eran las 11:42 cuando nos dispusimos a cruzar una vez más el Río Coranzulí y allí supimos que nos encontrábamos cercanos al yacimiento boratero de Loma Blanca, en donde trabajan Vilma y su esposo.

El paisaje es sumamente cambiante y a poco de andar nos adentramos en una quebrada sumamente colorida. Estamos entre los 4300 y 4400 metros de altitud sobre el nivel del mar.

Saliendo de esta quebrada (4400 msnm) se nota la presencia de un pequeño caserío.

El paisaje se abre nuevamente a una inmensa planicie y desciende hasta aproximadamente 4100 metros sobre el nivel del mar.

La ruta se ensancha y me llama poderosamente la atención la montaña que se ve en la foto.

Poco fue lo que tardamos en llegar al lugar en donde nace una encrucijada de caminos. Si tomamos  hacia la izquierda seguiremos por la Ruta 40 y si seguimos derecho tomamos la Provincial 70 y también  a través de esta se hubiera podido tomar la bifurcación que conduce a la localidad de El Toro tomando la Provincial 77.

 

Tal como lo señalamos Chugo y yo en este lugar mostramos claramente por donde vamos a seguir, mientras que Juan indica que hemos resuelto no ir por estas rutas.

 

Tal como reza el cartel el camino no es apto para equipos pesados y ya van a ver porque.

A partir de este instante es que comienza un camino del que podemos decir íbamos con muchos preconceptos formados producto de nuestras investigaciones en internet y la lectura de revistas especializadas en turismo - como ser la Revista Lugares -, pero cuya realidad no es tan terrible como la presentada en estas publicaciones.

 

Allá vamos!!!

Estamos en este punto a 246 Km. de San Salvador de Jujuy y a tan sólo 48 Km. de Susques. Al oeste de la ruta se puede apreciar una de las puntas del Salar de Olaroz.

 A las 12:45 y luego de andar durante 15 minutos por este tramo desconocido por todos nosotros de la Ruta Nacional 40, nos adentramos en una estrecha quebrada. Durante estos quince minutos podemos decir que el camino ha sido muy bueno con algo de piedra y arena suelta pero nada grave que pudiera complicar la marcha de los autos.

Y con uds. el camino estrecho!!!

En las fotos se puede observar claramente como se angosta el camino y las razones por las que se trata de un camino no apto para vehículos pesados.
A la salida de este tramo el paisaje vuelve a sorprendernos gratamente.

Allí nos encontramos con un pequeño cementerio. Todas las cruces pertenecían a una familia de apellido Quispe.

 

El camino continúa y el paisaje cada vez es más lindo.

 

El camino asciende hasta los 4400 metros sobre el nivel del mar. El estado del mismo es bastante bueno, sólo presenta algo de piedra y arena suelta, pero no representa un riesgo para los autos.

Luego de ello, pasamos por una estrecha quebrada que termina poco antes del camino que se bifurca hacia San Juan de Quillaques.

Finalmente llegamos al desvío que conduce a San Juan de Quillaques. En la foto se puede apreciar que el cartel indica que es la Ruta Provincial 74 Bis y queda a tan sólo 15 Km. La primer vista indica que no parece un camino dificultoso, sin embargo, el objetivo era llegar a Susques razón por el cual decidimos no adentrarnos a ese camino.

Previo a emprender nuestra arremetida final hasta Susques paramos en dicho cruce y nos tomamos varias fotos.

Los 3 Mosqueteros nos tomamos de las manos...y nos llenamos de energías positivas para superar los próximos 24 Km. que nos faltan hasta Susques.

Nuevamente el camino nos espera con una trepada que parecía interminable pero que los autos la subieron sin ningún chistar. En esta parte del camino Chugo le pasó rozando a una pared de la montaña. Con respecto a ello dice en su blog: "La cuestión es que el “tractor” subió sin sentirla, siempre acelerando a fondo y sin detenerse (primera marcha a 40 km/h). En el final de la misma - dada la obligada “alta velocidad” y presencia de arena y piedra- casi rozamos la “pared” que teníamos a nuestra derecha y en el zig-zag le pasamos raspando al precipicio a nuestra izquierda. Casi, casi..."

Seguimos nuestro camino, el paisaje que puede apreciarse es súblime. Chugo lleva la delantera por varios metros y vemos a lo lejos que se detiene junto a una máquina vial. Pensamos por un momento en que podría llegar a tener un problema. Lejos de ello, Chugo y quien estaba a cargo de la máquina vial hicieron una foto de antología en donde se juntaron los "tractores" .

En la foto Chugo señala al tractor y el trabajador con un excelente sentido del  señala "el tractor" y le da el Ok con el pulgar hacia arriba.

Tras esto ingresamos a una zona de descenso muy empinada. Queda claro por las fotos y este video que la subida en sentido contrario (viniendo desde Susques) es muy pero muy brava.

 Tras este pronunciado descenso nos encontramos con un pequeño grupo de casas. A los cinco minutos de andar en este último tramo vemos como de a poco se van descubriendo tras las montañas el pueblo de Susques. Cuando ya podemos verlo los V4 paramos y festejamos con todo.

Llegamos a Susques. Misión cumplida, eran las 14:17 horas. Nuestra entrada triunfal, luego de los festejos sería a las 14:30 horas.